ACOSO Y DERRIBO

La psicología evolutiva señala que  “juzgar lo que tenemos hoy con lo que ha pasado hace siglos es de una incultura tan grande, que habría que explicar que los tomates no nacen en un supermercado”. 

Juan Piombo Mendizábal
Juan Piombo Mendizábal

Que la sociedad norteamericana tiene un problema no es ninguna novedad, en realidad tiene muchos y complicados, al igual que otras sociedades como puede ser la nuestra, pero el caso es que los peculiares estadounidenses se han envuelto en la bandera del revisionismo histórico, enmarcado en un arraigado problema que reina en estos terruños, el racismo puro y duro desde que llegaron los esclavos al territorio comanche. Territorio habitado por un gran número de nativos, aunque también hay que decir que indios,  indios quedaron muy pocos. Lo cierto es que con la muerte del afroamericano George Floyd  ha comenzado una serie de acontecimientos inusuales, muchos de los cuales muy comprensibles, pero otros muy tristes, ver en particular el derribo de monumentos o estatuas que podrían dejar algún atisbo de esclavismo de la época, (se intenta rever la colonización). Pero también nos encontramos que los propios indios tenían esclavos, los portugueses e ingleses esclavizaban, los españoles por lo general se cruzaban con nativas y en Estados Unidos mataban a los "descendientes de los nativos".  Pero bueno, la cosa fue degenerando y se ha trasladado a otros países europeos y del centro o sur de América entre otros, dando lugar a un sin número de hechos, más propios de rabia contenida y en algunos casos incentivados por ciertas personalidades del mundo del deporte o espectáculo en general, con un marcado dejo de decadencia cultural incomprensible. La psicología evolutiva señala que  “juzgar lo que tenemos hoy  con lo que ha pasado hace siglos o muchísimos años es de una incultura tan grande, que habría que explicar que los tomates no nacen en un supermercado”. 

El acoso, que va de la mano del  racismo en general por el color, credo o sexualidad, es  denigrante, desgraciado, horrible, inhumano y denunciable con toda la fuerza de las leyes, sobre todo teniendo en cuenta que estamos en el siglo XXI, supuestamente evolucionado, donde las sociedades ya han pasado calamidades históricas como la esclavitud, o el holocausto entre otras desgracias provocadas por el hombre, las cuales nos muestran esa irracionalidad que ya nunca más deberíamos transitar, por decencia por cultura, por dignidad. Ahora, el derribo no creo que en ningún caso esté justificado a mi parecer, el hecho de quitar una estatua no borrará la historia y pintarla o derribarla tiene que ver más con la impotencia o rabia normalmente irracional con atisbo de barbarie cultural, un regreso a otros tiempos ya pasados. Un monumento nos puede servir para enterarnos lo bueno o lo malo si se quiere, (derribemos el Acueducto Romano que esclavizó a miles de ibéricos españoles), y así hasta el infinito podríamos decir: “Estupidez humana en gran escala, los hechos deben ser en su tiempo, en sus años y con su historia”.  Veíamos hace un tiempo como el estado islámico demolió parte de Palmira, antigua ciudad en el corazón de Siria, entre otros monumentos y otras ciudades, y ahora vemos con cierto estupor pintadas a Cervantes, padre de la literatura de habla hispana que de esclavista no tenía nada, o la estatua del Fray Junípero Serra recordado por su gran labor en favor de las comunidades indígenas, que evitó la matanza de miles de nativos, creo que no costaría nada leer, estudiar, culturalizarse un poco. Lo mismo que se les ha dado por Colón, (4 viajes en su vida poco ha podido esclavizar), un gran navegante y descubridor pero esclavizador o racista?  Y la lista es larga… particularmente veo que por lo general se hace un totum revolutum y la cultura se nos va un poco al carajo, con perdón, bueno es lo que hay por el momento, por desgracia nos invade la poca cabeza. Felices vacaciones y que Dios nos bendiga.